Su actividad fue frenética. Guardiola finalmente se negó a hablar con él y lo cedió al Milan. Fue otro de los grandes hitos de la primera expedición de James Cook. Ibra fue convocado por el entrenador Erik Hamrén para participar en el campeonato europeo disputado en Polonia y Ucrania, aunque fueron eliminados en la fase grupos tras conseguir una sola victoria (2:0 sobre Francia). También resultaron importantes y decisivos David Villa y Carles Puyol, pese a no haber participado por lesión en la conquista del tercer título europeo.