En 1984, la dirigencia del club, circunstancial pero providencialmente, camiseta barcelona estaba en manos de Miguel Monteverde por un fallo de la Federación Peruana de Fútbol -encabezada por Alberto Espantoso- que marginó de la institución a Jorge Labarthe que se la había ingeniado con estatutos muy originales para entornillarse en la directiva. También se alquiló …